Aprende a Evitar las Puntas Partidas

peluqueriaycabello
22 oct 2015
3 Min. de lectura

No laves el pelo todos los días: si bien esto puede ser relativo, al lavar el cabello a diario le quitamos sus aceites naturales. A largo plazo, el pelo se resentirá y la muestra de este malestar será la aparición de puntas secas y partidas.

Cepilla tu pelo con delicadeza: siempre desde la parte inferior, sin tirarlo y con una peineta o cepillo que no corte el cabello.

Aplica shampoo sólo en tu cuero cabelludo: esto se ha mencionado muchas veces ya, pero lo que se ensucia es el cuero cabelludo, no el pelo en sí. Realiza un suave masaje y deja que la espuma que caiga limpie de manera “automática” el resto del pelo. Queda prohibido refregarlo como si fuera el fin del mundo.
Usa acondicionador: o en su defecto, una mascarilla de tratamiento. Unas puntas humectadas se mantendrán sanas por más tiempo y así, se evitará el temido corte de puntas. También, el uso de aceites naturales es una buenísima opción. A mí me encantan.
Seca tu pelo con cuidado: muchas veces creemos que restregar el pelo con la toalla es bueno porque el cabello se seca rápido. Eso es matarlo de a poco, ya que la fricción que provoca la toalla provoca que las cutículas de abran, se sequen y se partan. La idea apretar mechones de pelo con una toalla suave o de microfibra para que de esa forma el proceso sea más delicado. También se pueden usar poleras de algodón.
Usa peinetas de dientes anchos cuando el pelo está mojado: si te ves en la necesidad de peinar tu pelo cuando este está mojado, debes hacerlo con una peineta de dientes anchos. De esta forma se evitarán los tirones y cortes innecesarios que podría provocar una peineta de dientes finos.
Evita el calor del secador directo: en el hemisferio sur se acerca el invierno, por lo que usar secador de pelo se hace muy necesario. Si no lo puedes evitar, dirige el calor al cuero cabelludo, manteniendo una distancia prudente y moviéndolo de manera constante, pero nunca apliques el calor directo en las puntas. Ellas serán las primeras en secarse y no te darás cuenta cuando ya estén perfectas.
Cuidado al usar la plancha: para evitar el tener que pasar la planchita mas veces de las necesarias, siempre usa una peineta para ir separando los mechones. Mientras más desenrredado esté el pelo, el resultado será mejor. ¡Y no olvides usar el protector de calor!
Ondula desde la mitad: si en cambio te gusta ondular tu pelo, hazlo desde la mitad del mechón y luego, mueve el rizador para finalizar en las puntas. De esa forma los rizos durarán más y evitarás el daño a tus puntas de manera innecesaria.
Corte de puntas: nos guste o no, debemos hacer un pequeño corte cada cierto tiempo. No se trata de eliminar muchos centímetros, sino que cortar lo justo y lo necesario para eliminar cualquier punta fea. A mi me gusta sentarme en un lugar con buena luz y buscar puntas partidas para cortarlas una por una. Sí, tengo mucha paciencia, pero con esto mi visita a la peluqueía se reduce a dos o incluso sólo una vez en el año.